La ansiedad y su paso por nuestro organismo

Nuestro agitado ritmo de vida, nuestras expectativas y las de los demás, nos cargan de obligaciones, de compromisos y nuestra agenda se copa lo que hace que estemos volcados fuera de nosotros respondiendo a las exigencias externas.

Con el tiempo perdemos nuestra conexión con nosotros mismos y se instala un malestar, una angustia que se vuelve casi permanente, un ruido o estática de fondo que nos dice que algo terrible va a pasar o que no vamos a alcanzar a cumplir con todo lo que debemos hacer, si esto se repite día a día, nos acostumbramos a ello. Debido a nuestra desconexión, no lo notamos y nos vamos acostumbrando.

Un buen día de descanso, notamos que no podemos estar tranquilos en el presente y en casos mas fuertes, sentimos palpitaciones, opresión en el pecho, gastritis, tenemos pensamientos intrusivos de algo terrible está pasando y ya no es fácil retornar a la calma.

A nivel fisiológico, el cortisol se mantiene elevado y cuando esto ocurre por periodos largos, se empieza a generar agotamiento no solo cerebral sino alteraciones en el sistema endocrino, puede afectarse el sistema digestivo con gastritis, intestino irritable, la presión puede aumentar y la ansiedad sigue su curso alternando con depresiones donde los sistemas del cuerpo intentan recuperarse y si no paramos, el ciclo vuelve a repetirse.

Ya pasado un tiempo, se observa un cerebro con mayor cantidad de ondas lentas, problemas de memoria, fatiga, puede aparecer la fibromialgia y alteraciones endocrinas como por ejemplo el hipotiroidismo y generar un cuadro mas complicado cada vez.

De lo anterior, de entiende la importancia de mantener nuestros niveles de ansiedad controlados y no dejar que crezca hasta niveles peligrosos que comprometan todo nuestro sistema.

El neurofeedback ayuda a controlar la ansiedad y la depresión y a mantener un estado de ánimo estable y agradable, nos ayuda a entrenar la resiliencia basado en el neuroplasticidad, esta maravillosa herramienta de aprendizaje, enseña al cerebro de una manera gentil a adaptarse mejor a la circunstancias y sortear mejor los desafíos de la vida.